Tuesday, January 13, 2015

Je Suis Charlie or Je ne suis pas Charlie? (Español Incluido)



In recent days, we the world have suffered yet another horrific attack on mankind.  The journalists of Charlie Hebdo in Paris enlightened the world to a point of view not everyone or every culture agreed with but their voices expressed through the medium of journalism are the very foundation of democracy.  Freedom of speech is a common ideal promoted in the democratic world but as we learned a few days ago there is a severe price to be paid for that freedom.  At what cost does freedom ring?

History has shown that freedom is paid for with the blood of our beings.  Conflicts, fights, wars and terrorism have taken the lives of many men and women, and at the end of the day they all had one thing in common….they lost their lives!  Humanity has yet to place an attainable value on the human soul, a calculated replacement or opportunity cost of one’s life, so therefore I ask what is the price of freedom?  What is the price paid for an ideal that by definition indicates without cost?  When modern nations allow heinous acts to go unaddressed, when modern nations do not create an environment where all it’s people can live with dignity, respect and equality without marginalization and in fear of speaking and expressing their opinions and lives freely then democracy trembles and the price is paid.  If any democratic nation wishes to remain relevant in the world of democracy and wishes to have their laws and customs respected, then they too must in turn move forward progressively by respecting and recognizing the laws of their partner countries that provide the freedoms to it’s citizens on which democracy is built. The foundation of our diplomatic ties must be equal to our commitment of a free and open society and when our diplomatic partners waiver it is our duty to communicate the disfavor of their offense.  You cannot be an open and transparent democracy without the ability to provide your citizens with the security of free and open dialogue.  The expression of our speech openly and without cost is the very core of a democratic government and should be cultivated and encouraged.  When we lack participation from all segments of society this contributes to the dissipation of democracy.

I am truly shocked that in recent days there have been attempts by a few to find fault with the victims.  Some people have indicated that the accountability of offensive speech is retaliation.  The written word is an appropriate retaliation or a pointed interview, however to respond to the written word, the freedom of expression or an editorial with the violent act of calculated murder is beyond heinous.  We will never all agree with each other’s positions on every subject.  Those disagreements are what creates dialogue and generates ideas and growth and should be embraced not ridiculed.  It is our duty to present our differences, to present alternative approaches and options for future generations.  The creation of change is our only path forward for a more cohesive and unified world.

Je Suis Charlie is not about agreeing with the content of Charlie Hebdo or one’s political positions or expressive voice. Je Suis Charlie is showing solidarity with the foundation of democracy, that being freedom of speech and expression, no matter how significant or insignificant the content may be, a person, entity or any government should never silence our opinions or ideas.  Even if you feel a voice or opinion has no substance or relevance or even if you find one’s speech offensive, nobody should die for the opinions or expression of their speech!

Therefore.... Je Suis Charlie!


En los últimos días, el mundo ha sufrido otro ataque devastador contra la humanidad. Los periodistas de Charlie Hebdo en París alumbraron el mundo con un punto de vista con el cual no todo el mundo o todas las culturas estaban de acuerdo, pero con sus voces y opiniones expresadas por medio del periodismo son el fundamento esencial de la democracia. La libertad de expresión es un ideal común promovido en el mundo democrático, pero como pudimos vivir recientemente, esta claro que todavia hay un alto precio a pagar por esa libertad. Entonces, ¿Cual es el verdadero precio de la libertad?

La historia ha demostrado que la libertad se paga con la sangre de nuestros seres. Los conflictos, peleas, guerras y el terrorismo han cobrado la vida de muchos hombres y mujeres, y al final del día todos ellos tenían una cosa en común .... perdieron sus vidas! La humanidad todavía tiene que otorgarle un posible valor al alma humana, un reemplazo o costo de oportunidad calculado de la propia vida, por lo que, por tanto, me pregunto cual es el precio de la libertad? ¿Cuál es el precio a pagar por un ideal que, por definición, no tiene costo? Cuándo naciones modernas permiten actos atroces que no se abordan, cuando las naciones modernas no crean un ambiente donde todas las personas puedan vivir con la dignidad, el respeto y la igualdad sin marginación y con el temor de hablar y expresar sus opiniones y vidas libremente, entonces la democracia tiembla y el precio se paga. Si cualquier nación democrática quiere seguir siendo relevante en el mundo de la democracia y quiere que los demás respeten sus leyes y costumbres, entonces ellos también deben a su vez avanzar progresivamente por el respeto y el reconocimiento de las leyes de sus países aliados ,que proporcionan las libertades de sus ciudadanos en el que la democracia se construye. La base de nuestras relaciones diplomáticas debe ser igual a nuestro compromiso de una sociedad libre y abierta, y cuando nuestros socios diplomáticos renuncian a ello, es nuestro deber comunicar la desaprobación de dicho delito. No se puede tener una democracia abierta y transparente, sin la capacidad de proporcionar a sus ciudadanos con la seguridad del diálogo libre y abierto. La expresión de nuestra forma de hablar abiertamente y sin costo es la esencia misma de un gobierno democrático, y por ende, debe ser cultivada y promovida. Cuando nos falta la participación de todos los segmentos de la sociedad esto contribuye a la disipación de la democracia.

Estoy realmente indignado de que en los últimos días ha habido intentos por parte de algunos en encontrar fallos con las víctimas. Algunas personas han indicado que la rendición de cuentas sobre libre expresión ofensiva es represalia. Un editorial seria una represalia apropiada o una entrevista en especifico, sin embargo para responder a las palabras escritas, la libertad de expresión o un editorial con el acto violento de asesinato calculado es algo atroz. Nunca vamos a estar todos de acuerdo con las posiciones de cada uno sobre todos los temas. Aquellos desacuerdos son lo que crean un diálogo y generan las ideas y crecimiento y estos deben ser abrazados, no ridiculizados. Es nuestro deber presentar nuestras diferencias, presentar enfoques alternativos y opciones para las generaciones futuras. La creación de cambio es nuestro único camino a seguir para un mundo más coherente y unificado.

Je Suis Charlie no se trata de estar de acuerdo con el contenido de Charlie Hebdo o de una posición política o voz expresiva. Je Suis Charlie es mostrar solidaridad con el fundamento de la democracia, siendo esto la libertad de palabra y de expresión, no importa que tan importante o insignificante el contenido pueda ser, una persona, entidad o cualquier gobierno nunca debería silenciar nuestras opiniones o ideas. Incluso si usted siente que una voz u opinión no tiene sustancia o relevancia, o incluso si usted encuentra ofensivo algún discurso, nadie debería morir por las opiniones o expresión de su discurso!

Por lo tanto .... Je Suis Charlie. Yo soy Charlie.